Pulpo Frito

Pulpo Frito y Alioli de su Tinta

|

El pulpo es un molusco cefalópodo que se caracteriza por tener un cuerpo redondeado del que salen ocho tentáculos cubiertos por ventosas. Es popular por su inteligencia y es consumido en todo el mundo por su alto valor nutricional y su agradable sabor. En comparación con otros mariscos, el pulpo es bajo en colesterol y rico en vitaminas A, B, C y D, calcio y proteínas de fácil digestión, además, su bajo contenido en grasa y riqueza en minerales y vitaminas contribuyen a una dieta saludable.

Pulpo Frito

Además es considerado un manjar en muchas gastronomías costeras y forma parte de numerosos platos en distintas regiones del planeta.

El pulpo en el mundo

En la gastronomía griega, por ejemplo, se disfruta tanto asado a la parrilla como cocido lentamente en vino tinto, convirtiéndose en el centro de las mesas durante las reuniones familiares y las festividades. La clave de su preparación en Grecia reside en la simplicidad, permitiendo que el sabor del mar se exprese plenamente.

Por otro lado, Japón celebra la delicadeza del pulpo de una manera completamente diferente, destacando su uso en platos fríos como el sashimi o incorporándolo en ensaladas de mariscos con vinagre. El takoyaki, pequeñas bolas de masa rellenas de pulpo, es un bocado popular en las calles de Osaka, mostrando la capacidad del cefalópodo para adaptarse a preparaciones tanto refinadas como cotidianas.

En Portugal, el “polvo à lagareiro” es una forma tradicional de apreciar el pulpo, asado y servido con papas al murro y regado generosamente con aceite de oliva. Este plato, rico y reconfortante, encapsula el amor portugués por los sabores robustos del océano.

México ofrece una perspectiva diferente al utilizar el pulpo en ceviches, ensaladas y tacos, maridándolo con ingredientes picantes y cítricos que resaltan su textura suave. La cocina mexicana es experta en equilibrar los sabores complejos, y el pulpo es una tela perfecta para sus vibrantes sazones.

En España, uno de los platos más populares es el pulpo a la gallega. Después de cocerse durante treinta minutos en agua hirviendo, se corta en trozos y se le añade aceite de oliva, sal y pimentón. Su presentación tradicional es sobre un plato de madera.

En La Bola de Jorge Bosch, los servimos como pequeños bombones, con un alioli con un característico color oscuro.

Ingredientes

  • Pulpo – 200 Gr
  • Harina para frituras – 40 Gr
  • Pimentón de La Vera – 10 Gr
  • Alioli de Tinta – 60 Gr
  • Sal

Elaboración

Para el alioli de tinta, mezclar en la thermomix o túrmix 500 gr de mayonesa, 45 gr de ajo pelado y 8 gr de tinta comestible. Reservar en un biberón o una manga pastelera.

Cocer el pulpo al vacío durante 4 horas a 80º. Cortar los rejos del pulpo en trozos de bocado, pasar por la mezcla de la harina para frituras y pimentón de la vera y freír en abundante aceite. Salar y servir acompañados del alioli de tinta.