El gofio es un alimento emblemático de las Islas Canarias, con una historia que se remonta a los tiempos de los guanches, los habitantes originales de las islas. Este producto, elaborado a partir de cereales tostados y molidos, como el trigo o el maíz, es un pilar fundamental en la dieta canaria. Tradicionalmente, el gofio se preparaba en molinos de piedra y era la base alimenticia de los antiguos canarios, actualmente una de sus elaboraciones principales es el Escaldón de Gofio.
Con una textura única y un sabor ligeramente ahumado, el gofio se destaca por su versatilidad en la cocina. Se puede encontrar en múltiples presentaciones, desde el gofio amasado, un acompañante perfecto para potajes y guisos, hasta su uso en postres y dulces, como en mousses o helados. Esta versatilidad se debe a la variedad de cereales utilizados en su elaboración, cada uno aportando un sabor y textura distintos.
El gofio no solo es un alimento, sino también un elemento cultural. Su importancia ha sido reconocida oficialmente, siendo considerado como Bien de Interés Cultural en la categoría de Patrimonio Etnográfico. En la vida cotidiana de las islas, el gofio se consume de muchas maneras, siendo un elemento esencial en la mesa de los canarios.
En la gastronomía contemporánea, chefs innovadores han incorporado el gofio en platos que combinan la tradición con la modernidad. Esta reinvención ha llevado al gofio a ser parte de recetas creativas y sofisticadas, adaptándose a las tendencias actuales de la cocina.
En nuestro restaurante, La Bola de Jorge Bosch, rendimos homenaje a este ingrediente tan representativo con nuestra especialidad: Escaldón de Gofio de Caldo del Día, preparado al momento. Aquí compartimos la receta para que puedas disfrutar de un toque de la cocina canaria en tu hogar.
Ingredientes
- Caldo de Puchero – 100 Gr
- Gofio de Millo – 100 Gr
- Picatostes – 4 Unidades
- Cebolla Roja – 4 Pétalos
- Cebollino – 1 Gr
- Mojo Rojo – 10 Gr
- Mojo Verde – 10 Gr
Elaboración
Disponer en un bol el gofio de millo, los picatostes y el cebollino. A la hora de servir, verter el caldo de puchero según se desee más o menos espeso y revolver todo el conjunto hasta que se homogenice. Servir junto a los pétalos de cebolla roja que pueden usarse como cuchara.